Arte e ilustración en América Latina

 

 

Por Susana Benko.

Muchos artistas dibujan para ilustrar un contenido. Es untps://www.notion.so/TAREAS-DIARIAS-c6e45e15883345db90d6d155064cf426a actividad estrechamente relacionada con el diseño y el campo editorial. Se publican ilustraciones en libros, revistas, periódicos, carteles, etc., cuyos temas e intenciones pueden ser muy variados. Pueden acompañar obras literarias, ilustrar explicaciones científicas, incentivar el humor y la crítica como sucede en las caricaturas, o bien, ser solo ornamentos vistos en viñetas, letras capitulares, etc. En sus diversas modalidades, la ilustración puede representar un motivo real o imaginario.

El dibujo y la estampa, pertenecientes a las ‘bellas artes’, se vinculan a la ilustración. Un buen ilustrador sabe dibujar con el fin de comunicar. A lo largo de la historia, se le ha dado importancia a la formación de estas disciplinas. A finales del siglo XVIII, por ejemplo, se creó la Escuela de Grabadores en México. Y, en el siglo XIX, el dibujo, los medios fotomecánicos y la estampa tuvieron enorme importancia al aparecer gran número de publicaciones ilustradas en toda esa región.

Durante los primeros años del siglo XX se hereda parte de la producción editorial del siglo anterior. Entonces se destacó José Guadalupe Posada, quien fue inspirador del muralismo mexicano. Tiempo después, Adolfo Best Maugard concilió las referencias mexicanistas con elementos de culturas foráneas. En Uruguay, la ilustración política cobró auge dado su contexto violento. Destacaron las revistas El Monigote, Cara y caretas, entre otras, mientras que en Venezuela, Leoncio Martínez (Leo) realizó caricaturas críticas para varias revistas, entre estas, Fantoches, del cual fue fundador.

El concepto del magazine, con marcada influencia del estilo art nouveau, tuvo fuerte impacto en revistas chilenas. Ello es visible en la ornamentación en portadas, avisos publicitarios y dibujos que acompañan a textos de variados temas. Destacan Chile ilustrado, Sucesos, Zig-Zag y Corre-Vuela. En Venezuela fue particularmente notable la primera etapa de la revista Élite con las ilustraciones de Ninón Crespo, mientras que en Brasil, la Semana del Arte Moderno en 1922, impulsó criterios de modernidad con una impronta propiamente brasileña de la mano de artistas como Emiliano Di Cavalcanti y Tarsila Do Amaral.

Entre los años veinte y cuarenta, los llamados “Artistas del pueblo”, ilustraron la revista Claridad, la vanguardia en lucha en Argentina. Se centraban en temas políticos y sociales, a la vez que promovieron diversas tendencias de vanguardia. Claridad fue también una editorial, cuyas portadas de libros fueron ilustrados por los artistas Xul Solar y Emilio Pettoruti. La realización de ilustraciones abstractas las realizó Lidy Maldonado en 1944 para la revista argentina Arturo, medio difusor de ideas concretistas.

El artista Carlos Cruz-Diez, en Venezuela, ilustró a partir de los años cuarenta en diversos medios impresos. Esta experiencia editorial dejó huella en su obra plástica posterior. Más adelante, Pedro León Zapata y Abilio Padrón, trabajaron la caricatura como forma de expresión en su obra artística.

Hoy día las tecnologías digitales posibilitan a las nuevas generaciones de ilustradores latinoamericanos a asumir de manera novedosa la integración del arte, el diseño y la comunicación.