Los Disidentes
Por Álvaro Mata
Para la década de 1940, los estilos pictóricos que dominaban en Venezuela eran el paisajismo tradicional y el realismo social, cuyo origen se encuentra en el muralismo mexicano, y que se centraba en los conflictos sociales, en el hombre y la tierra.
Así las cosas, el arte abstracto y geométrico, que había florecido en Europa y que se encontraba en plena efervescencia para entonces, no se conocía ni mucho menos era aceptado entre nosotros.
A mediados de los años 40, un grupo de jóvenes artistas plásticos venezolanos admiradores del abstraccionismo geométrico sienten la necesidad de viajar a París, con la intención de empaparse de lleno de las nuevas tendencias pictóricas.
En la “ciudad luz”, comienzan a estudiar con fruición el abstraccionismo geométrico, y se deslumbran con el nuevo lenguaje pictórico. Deciden aglutinar fuerzas y agruparse bajo el significativo nombre de “Los Disidentes”, para dar a conocer el nuevo hallazgo en su país natal a través de una revista homónima.
Entre sus integrantes más consecuentes estuvieron los pintores Alejandro Otero, Mateo Manaure, Jesús Soto, Carlos Cruz-Diez, Pascual Navarro, Perán Erminy, Carlos González Bogen, Luis Guevara Moreno, Mercedes Pardo, Dora Hersen, Rubén Núñez, Armando Barrios, Alirio Oramas, Omar Carreño, Aimée Battistini y el filósofo José Rafael Guillent Pérez, entre otros.
Los cinco números de la revista Los Disidentes publicados en París, y con circulación en toda Latinoamérica, promulgaban un radical rechazo de las formas tradicionales del arte, y abogaban por el abstraccionismo geométrico, que consideraban llenaba la aspiración de modernidad del rezagado continente americano.
En el quinto y último número de la revista, publicado en 1950, apareció su virulento manifiesto, en el que señalaban: “No podemos mantenernos indiferentes ante el clima de falsedad que constituye la realidad cultural de Venezuela. A su mejoramiento creemos contribuir atacando sus defectos con la mayor crudeza, haciendo recaer las culpas sobre los verdaderos responsables o quienes les apoyan (...) Vamos contra lo que nos parece regresivo o estacionario, contra lo que tiene una falsa función. Hemos sido resultado y testigos de mucho absurdo, y mal andaríamos si no pudiéramos decir lo que pensamos, en la forma en que creemos necesario decirlo”.
El grupo Los Disidentes preparó la llegada y difusión del abstraccionismo en Venezuela, que caló con tal vigorosa fuerza, que engendró creadores que participaron en el concierto mundial de las artes abstractas, como fue el caso de Jesús Soto, Alejandro Otero o Carlos Cruz-Diez. Es por ello que la importancia de Los Disidentes en la plástica nacional fue decisiva.